Carreteras y Cambio Climático
Por Rocío Vásquez Jara
Derecho, Ambiente y Recursos Naturales
[Publicado en Diario La República el 13/06/19]
Según los últimos datos del Programa Nacional de Conservación de Bosques y Cambio Climático, en promedio se pierden alrededor de 1250 Km2 de bosques en la Amazonía peruana cada año, que equivale a casi la mitad de Lima Metropolitana. ¡Es decir, cada 2 años destruimos una superficie similar a toda Lima Metropolitana en los bosques amazónicos!
El 86% de estas pérdidas se concentran en 25 frentes de deforestación, principalmente alrededor de ejes viales y fluviales, tales como: la carretera Federico Basadre-Marginal, el VRAEM y la carretera Interoceánica Sur. Asimismo, el Servicio Nacional Forestal y de Fauna Silvestre (Serfor) afirma que “la apertura de vías es uno de los catalizadores [de deforestación] más importantes, ya que facilitan el acceso a zonas antes aisladas” y que “los ejes viales y fluviales explican el 62% de la deforestación en la Amazonia”.
Teniendo en cuenta además que el escenario de nuestra Amazonía es de baja gobernanza del territorio, sin una clara asignación de derechos sobre la tierra, y sin información de los impactos socioambientales que la expansión de las carreteras pueden acarrear; lo que podemos esperar, luego de su construcción, más que desarrollo es más deforestación, colonización de tierras, minería, tala ilegal y pérdida de vidas a consecuencia de actividades ilícitas y conflictos, recordemos el caso de Saweto, en Ucayali. Es por eso que las carreteras en la Amazonía no sólo deben ser consideradas como medios para acceder a servicios y mercados, sino que también son vías de acceso para actividades informales e ilegales.
La magnitud de este problema es tal que la deforestación constituye la principal causa de las emisiones de gases de efecto invernadero en nuestro país. Para enfrentar este problema el Perú se ha comprometido frente a las Naciones Unidas a reducir sus emisiones, dando un papel protagónico a las acciones de reducción de emisiones derivadas principalmente de la deforestación, las cuales representan el 70% del compromiso.
Para poder cumplir con este compromiso internacional el Perú ha identificado diferentes medidas para reducir nuestras emisiones, ocho de estas medidas buscan reducir las emisiones ocasionadas por el cambio de uso de la tierra, en donde la deforestación juega un rol protagónico. Pese a esto, ninguna de las actuales medidas busca atacar una de las principales causas de deforestación: la expansión de las carreteras.
Frente a esto, con el fin de velar por el patrimonio forestal y de fauna silvestre, el Serfor, ha comunicado que va a desarrollar una novena medida para luchar contra la deforestación asociada a la expansión de las carreteras en la Amazonía, a través de una mejora en su gestión para mitigar sus impactos como motor de la deforestación.
Esta es la oportunidad para lograr no solo los compromisos ante el cambio climático sino para abordar efectivamente el problema de la deforestación en nuestro país. Para ello es importante no solo el liderazgo del Serfor sino también la participación del Ministerio de Transportes y Comunicaciones, responsable de la promoción y regulación de las carreteras en el país; además de los Gobiernos Regionales, quienes tienen a su cargo la mayor cantidad de proyectos viales en la Amazonía.
“Mejorando la gestión de la infraestructura podemos reducir la deforestación en nuestra Amazonía”.